¿De dónde surgen las nuevas empresas? ¿de sueños, de pequeñas ideas, de propuestas recicladas o de proyectos ya existentes y comprobados? Actualmente muchos podrán decir que de proyectos ya existentes y comprobados, que ya todo esta hecho y que no hay nada más que ofrecer ni en bienes ni en servicios, que el tiempo para innovar ya pasó. De repente parece que tienen razón, un amigo muy cercano cita constantemente: «Después de la invención de la pólvora ya no hay hombre más fuerte y hábil que otro», que no quiere decir otra cosa que todo lo que se ha hecho después, ha sido en consecuencia de este primer paso.
Con las empresas parecería ser lo mismo, ya todo ha sido emprendido y no se puede proponer nada nuevo ¡No hay nada más alejado de la realidad! siempre tendremos la oportunidad de reinventar o refrescar un proyecto. Esa idea que te anda rondando, ese sueño que te lleva a desear convertir en realidad algo que parece una utopía, es probable que esté inspirado en algo ya existente en el mercado, pero con la certeza de que será algo fresco al aportar tu toque innovador y tu sello.
Con Propuesta Ícaro no inventamos la pólvora, pero dos amigos tuvimos la idea y las ganas de hacer algo diferente, refrescante y plural por la educación y el conocimiento, esto no le resta valor a lo que hacemos, ya que a este proyecto le inyectamos nuestras inquietudes, conceptos, filosofía y valores; haciendo que ésta sea una oferta distinta a otras con las que nos pudieran comparar y eso es lo que le da el valor agregado.
Que no te de miedo emprender tu sueño, no desistas, plásmale tu estilo, tu identidad, tu visión; que por la suma de estos elementos se destaque de todos los demás ¡Que tu anhelo se convierta en tu meta!
No deseches una idea por más pequeña que sea, puede ser el inicio de un negocio enorme o de la forma de vida con la que te sentirás realizado. Visualízala, materialízala, créala ¡QUE TU IDEA SEA TU EMPRESA!